El Papa pide a la comunidad internacional ayuda para Haití


Benedicto XVI pidió este lunes a la comunidad internacional que ayude a Haití ante los numerosos desastres naturales padecidos, a la vez que exhortó a respetar el medio ambiente y dijo que la explotación "insensata" de los recursos naturales afecta especialmente, por desgracia, a los más pobres.
El Papa así lo manifestó en el discurso que dirigió hoy al enviado Extraordinario y Plenipotenciario de Haití ante la Santa Sede (embajador), Carl Henry Guiteau, que le presentó sus cartas credenciales en el Vaticano.
Tras enviar un saludo al presidente de Haití, René García Preval, y subrayar la necesidad de que los haitianos vivan con "dignidad y seguridad", Benedicto XVI se refirió a los desastres naturales que han azotado al país caribeño en los últimos meses, "que han dañado -dijo- la agricultura y han agravado la ya difícil situación de muchas familias".
"Espero que la solidaridad de la comunidad internacional continúe sintiéndose, que apoye a los necesitados", dijo el Papa, que destacó que en los últimos años muchos haitianos han abandonado el país y buscado otros recursos para mantener a sus familias y que "es conveniente que, a pesar de las situaciones administrativas a veces problemática, se encuentran soluciones rápidas que permitan a estas familias vivir juntos".
El Papa añadió que la vulnerabilidad del país ante los desastres naturales ha propiciado una mayor concienciación de la necesidad de cuidar a la naturaleza.
"La protección del medio ambiente es un reto para todos. La explotación insensata de los recursos de la creación y sus consecuencias, que suelen afectar seriamente la vida de los más pobres, hay que afrontarla con medidas políticas y económicas que tengan en cuenta la dignidad humana y una eficaz cooperación internacional", afirmó el Obispo de Roma.
El Pontífice abogó también por el respeto a la vida y la defensa de la familia y abogó por la "recuperación" del valor del matrimonio en la sociedad.
El Papa Ratzinger pidió también que se protejan a las mujeres y a los niños para que no sean "víctimas de abuso, negligencia o injusticias".